martes, enero 23, 2007

 

Campamento Jesús (Jesus Camp)


ProtestanteDigital / mARTES - José de Segovia Barrón (23-1-07)

El pasado sábado el Canal + emitía a la hora de más audiencia un documental llamado Campamento Jesús. Habla de tres niños educados en el cristianismo evangélico más fanático, por medio de una organización llamada Kids On Fire, que entrena jóvenes como soldados del Ejército de Dios “para conquistar América en nombre de Cristo”. Esta película se proyectó en los cines de Estados Unidos, causando mucha controversia. Ahora opta a la nominación de los Oscar de este año. ¿Estamos ante una manipulación o una triste realidad?

La investigación de Heidi Ewing y Rachel Grady está basada en una evidente realidad. No hay duda que está presentada de un modo manipulador, ya que busca un efecto sensacionalista, pero no podemos decir que se invente los hechos. Sigue a estos niños (Levi, Rachael y Tory) desde su casa en Missouri, a un campamento pentecostal que se celebra en una localidad al norte de Dakota y tiene un nombre muy significativo: el Lago de los Diablos. La locura que allí se práctica como dones proféticos, hablando en lenguas y rodando por el suelo, no es algo que se hace especialmente para la película. Todo lo contrario, es algo que la pastora Becky Fischer considera positivo de mostrar en el documental. ¡Hasta ese punto llega su ceguera!

El problema está en un personaje que sirve de continua referencia a lo largo de toda esta historia, pero que no tiene relación alguna con el mundo evangélico. Es el presentador de un programa de radio de la cadena Air America, llamado Anillo de Fuego. Se trata de un abogado metodista llamado Mike Papantonio, protestante, pero liberal, que denuncia a la derecha cristiana americana, dando un sentido diferente a las palabras de Fischer. Habla también Ted Haggard, cuando era presidente de la Asociación Nacional de Evangélicos, pero luego criticó la película en una carta abierta a las cuarenta y dos denominaciones que forman su Asociación, que representa ya a treinta millones de evangélicos. En ella lamenta la visión extremista que se da de los evangélicos y la división que produce entre carismáticos y no carismáticos.

¿EN QUÉ MUNDO VIVIMOS?
Fischer es una mujer cristiana que ha dedicado su vida a llevar a los niños al Reino de Dios. Está llena de celo, pero vive en un mundo dominado por un simbolismo exagerado y una especie de teología de liberación ultra-conservadora, que lleva a una especie de ateísmo práctico cristianizado. Su teología es débil, ya que su comprensión de Dios y su voluntad se limita a una perspectiva, que ve todo el mal como obra del diablo. Obsesionada con la guerra espiritual, exagera la autoridad del cristiano, ya que considera que “Dios nos ha dado un poder especial en el universo, basado en nuestra posición en su jerarquía, por lo que podemos actuar en nombre suyo”.


Esta visión tan subjetiva nos lleva a la completa irrelevancia, en que vive el mundo evangélico hoy. Nuestro lenguaje militarista y triunfalista, habla de una guerra espiritual, que escandaliza tanto al no creyente como al cristiano que piensa. Porque vivimos en un mundo habitado de metáforas, que nos impide ya comunicarnos con nadie que no hable nuestra jerga. Es el vocabulario de nuestra música de alabanza. Es así como hablamos en nuestras predicaciones y escribimos nuestros libros. Algo para nosotros muy inspirador, pero irrelevante para el mundo que nos rodea…

¿ASÍ SOMOS LOS EVANGÉLICOS?
El diario El País comentaba esta película como un estudio del papel de la Iglesia evangélica en Estados Unidos. Nada más lejos de la verdad. Campamento Jesús es un cuadro que presenta la realidad de cierto fanatismo evangélico, pero no un análisis serio de la complejidad de un movimiento cada vez más importante en la sociedad norteamericana. Si tenemos que atender a lo que dice el documental, los evangélicos son aquellos que están en contra de Harry Potter y no creen en el calentamiento global del planeta. Lo que no deja de ser una extraña confesión de fe…


Es cierto que la visión de esta película es desasosegante. Da miedo, mucho miedo, ver esos trances colectivos, el fanatismo sectario y el extrañamiento del mundo, con que son educados muchos de nuestros jóvenes. Gracias a Dios, éste no es un campamento normal cristiano, muchos de nuestros hijos no son educados así, ni van a ese tipo de iglesia.

Los niños que salen en este documental son agradables, expresivos, cuidadosos, sensibles e inteligentes, pero me temo que están siendo abusados psicológicamente, ya que este tipo de adoctrinamiento no tiene nada de evangélico. Es un cuadro manipulador, pero como dijo Joseph Conrad, “no hay nada más fácil de ser tildado de exageración que el lenguaje de la verdad desnuda”…

José de Segovia Barrón es periodista, teólogo y pastor en Madrid
© J. de Segovia. ProtestanteDigital.com (España, 2007).

Ver el trailer del documental emitido por Canal +, formato [.rm] [.wmv].
Ver vídeos de las reacciones al documental de varios profesionales españoles.

Comments:
En mi opinión, José de Segovia no es justo con las familias pentecostales-carismáticas que llevan sus niños al campamento de Becky Fischer. Pienso que al llamar "trance" a lo que los niños viven demuestra no entender la espiritualidad carismática, con sus fenómenos de descanso en el espíritu, quebrantamiento, lenguas... Sí, las autoras buscan sensacionalismo; ponen imágenes impactantes sin explicarlas, el lenguaje "militar" no lo entiende el mundo pagano... pero eso no significa que la espiritualidad pentecostal y los dones del Espíritu no puedan ministrarlos ya los niños. He escrito un artículo sobre esto en ForumLibertas.com:

http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=7209&id_seccion=10
 
Gracias por su comentario.

Aparte de la cuestión de la 'espiritualidad carismática', lo que más me preocupa a mí de lo visto en el documental, es la forma de enseñar a los niños que, en mi opinión, muestra síntomas de una cierta manipulación por parte de los 'educadores'.

Si atribuimos a los niños la capacidad de participación en diversas expresiones de su fe, incluyendo un papel activo en la misión de la iglesia (por ejemplo, como dice Vd., por medio del ejercicio de los dones del Espíritu) como pequeños predicadores y evangelistas -y hasta cierto punto estoy de acuerdo con esta postura-, entonces también debemos atribuirles la capacidad de razonar, reflexionar y escoger libremente entre argumentos alternativos por medio del uso de su propio criterio.

Sin embargo, en el documental, no veo a los 'educadores' animando precisamente dicha reflexión. En cambio, se ponen de pie delante de los niños, hablándoles en términos de 'ellos' y 'nosotros', 'nosotros tenemos la verdad', etc., sin ofrecerles criterios de reflexión o la posibilidad de pensar por sí solos. En este sentido el discurso 'militar' adoptado se extiende también a una obediencia ciega, en vez de una respuesta libre basada en la debida reflexión. En mi opinión, se trata de un sistema cerrado: de 'pensar' y actuar ‘porque sí’, en vez de un sistema abierto donde se respetan profundamente las opiniones propias de los niños y se les da intencionadamente la oportunidad de incluso cuestionar lo recibido. Personalmente, según mi lectura de los Evangelios, pienso que el modelo de educación/discipulado que nos deja Jesús de Nazaret se aproxima mucho más al sistema abierto mencionado arriba, ya que él en muchas ocasiones permite la discusión y la expresión de dudas, y, además, plantea alternativas inconcluyentes (por ejemplo, mediante las parábolas) que provocan precisamente una investigación o búsqueda personal respecto a la verdad.

Mi inquietud acerca de sistemas cerrados de enseñanza se aplica, desde luego, a muchos sectores de la iglesia, no solamente a los pentecostales. Pero si, además, los 'educadores' llaman a los niños a una participación, no sólo a base de una enseñanza sesgada, sino también en un ambiente cargado de emoción y potencialmente contagioso, para mí éstos son indicios del adoctrinamiento manipulador y del sectarismo.
 
Publicar un comentario

<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?


Suscribir con Bloglines